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Redes Sociales

Cuidado con las Faltas

El inolvidable libro Nacho, varios volúmenes de Caligrafía Dominicana, uno que otro folleto de Ortografía y la entrega  y dedicación de una maestra de Lengua Española que velara por que sus alumnos iniciaran oraciones con letra mayúscula, limpia, clara y legible, asegurando de esta forma que en un futuro no la hicieran quedar en vergüenza con su escritura (Gracias Profe) era la garantía de que tuviéramos una expresión escrita de calidad o por lo menos sin faltas graves. Hasta que con la aparición del internet, la llegada del Messenger y  la popularidad de las redes sociales  fuéramos testigos de “horrores ortográficos” (porque un error es cualquier cosa delante de las atrocidades que nos toca leer) que sobrepasan los límites de lo increíble.

  • Lla nació el bebe
  • Los meses se ban bolando
  • Cumpleaños solpresa de ¿…?
  • Cuando se me acaban mis fuersas hay entras tu… como asta haora lo as echo grasias señor mil veces grasias

Son solo  una trágica muestra  que nos han dado las redes sociales (específicamente Facebook)  de que el índice de analfabetismo en nuestro país está mucho más elevado de los que imaginamos, ya que tenemos un gran número de personas que “saben” leer y escribir quienes evidentemente  necesitan ser alfabetizados nueva vez  porque escriben con tantas faltas de ortografía que leer un párrafo de su autoría produce “Urticaria Visual”

  • Olbida de sus ijos siempre nos tiene solpresas
  • Dios te vendiga
  • Diache mi comp esta dañada q cosa esta me ase mucha falta mas q asierta persona

Oh Dios!

Hablando en Dominicano

Vale aclarar que  cuando hablo de “horrores ortográficos “no estoy tomando en consideración expresiones coloquiales con las que los nacionales de mi querida mitad de isla hemos dado un toque personal al idioma español:

  • Toy’ jarto
  • Eto’ no e’ pa’ mí
  • No toy’ en eso
  • #queseto
  • #susantodio
  • Eto’ no e’ limpio… etc

Pero hasta estas  cosas hay que saberlas escribir 😉

 

Importando Elementos de Idiomas Extranjeros

Estoy casi convencida de que es parte de la dominicanidad adoptar acciones, estilos y costumbres de otras culturas, aunque en algunos casos quienes las usan no tienen la más absoluta idea de lo que significan (ni se molesta en averiguarlo antes de hacerla suya)  y nuestra escritura no escapa de esto:

  • @fregando
  • @comiendo
  • Un pensamiento serio y reflexivo… pero al final escriben lol
  • Me alegro de que estés bien Lmao

Cosas que dejan en evidencia que hay personas que creen que @, lol, Lmao son elementos decorativos. Señores, en la vida TODO tiene una razón de ser  y una forma de utilizarse, si usted ve algo que le resulta atractivo y quiere copiar, averigüe primero  qué es y cómo se debe utilizar para que no pase vergüenza (lo digo por experiencia).

¿Qué podemos hacer?

Aunque en alguna ocasión corramos el riesgo de pasar por pedantes hay que buscar la forma de arreglar este lío (o por lo menos intentarlo) y por el momento la acción más efectiva que podemos tomar es corregir humildemente a quienes dan las “metidas de pata” anteriormente citadas. Las correcciones cuando se hacen de manera discreta, con sinceridad y sin ánimo de burla no se sienten como ofensas. Se lo dice alguien a quien han corregido muchas veces  y estoy profundamente agradecida de cada una de esas correcciones.

Muchos de nosotros nos hemos vestido de amarillo apoyando la protesta civil para que se asigne al sector educación el 4% de PIB como está establecido en la ley 66-97 y nunca se ha cumplido. Pero no podemos dejar las cosas que están a nuestro alcance corregir, en manos de un sistema cuya principal característica es la deficiencia.

Quienes en algún momento reciban una corrección no deben sentirse mal, aunque en el instante que sucede puede resultar un poco embarazoso  la única forma de superarnos es a través de la corrección de nuestras faltas, de manera que lo mejor que podemos hacer es agradecer el gesto, burlarnos de nuestra propia ignorancia, enmendar la falta y continuar con la campaña.

Contamos contigo!

 

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